jueves

Grosse Oscheniksee



Otro de los platos fuertes del viaje. Mucho habíamos leído sobre él, pero no mucha gente había estado. Sobre el Grosse Oscheniksee teníamos oído que era más duro que Zoncolan o Anglirú. Sólo había una forma de saberlo.



Puede que no tenga las pendientes máximas del Anglirú, puede que no tenga las medias de pendiente de los últimos de Zoncolán, pero este puerto te mata. No hay ni un solo descanso en los últimos 10kms. Y es esa su dureza. Aguantar tantos kilómetros y tan musculares como estos.





A medida que llegábamos a la zona más despejada podíamos comprobar el desnivel que acabábamos de salvar. Las vistas, espectaculares.







la llegada a la enorme presa de piedra marca el final de la subida




Una subidia durísima. Sobre si es la más dura que he subido nunca, a parte de que pienso que este calificativo es muy personal, y depende de tus gustos, tu estado de forma, las circunstancias, o la compañía (jejej), yo creo que sí, que podría decir que es la ascensión más potente que he hecho en mi vida. 




No hay comentarios:

Publicar un comentario